Después de tantos años abrió su agenda, en su interior una foto, la miró, la miró fijamente, en su mente recuerdos disparaban sin piedad, sus ojos brillaron, su mano tembló.
Cerró los ojos, pero aún así seguía viendo la foto. Ella quien lo acompañó muchos años de su juventud, caminaron juntos bajo las estaciones, compartieron risas, dolor, comidas, bailes, música. Sus manos estuvieron unidas muchos años, su piel era reserva exclusiva, miraron juntos muchos atardeceres, y con besos y piel, esperaban juntos el amanecer.
Observó la foto, intento recordar la voz que tenía, o el movimiento de sus manos, el sonido de su sonrisa, cualquier cosa que lo trasladara a aquella mujer, a esos tiempos, donde ambos parecían más fuertes que el mundo.
La vida en algún momento los había separado, habían tomado caminos distintos, él ahora viudo, abuelo, cansado de vivir, miró la foto por última vez. ¿Qué habrá sido de ella?, ¿es feliz?, ¿se cumplieron sus sueños? ¿habrá cerrado ya sus ojos para siempre?..
