Donde están los buenos momentos?, en mi interior gritos desesperados, a veces ya no se pueden disfrazar con tristes sonrisas, y que me hacen sentir una persona vacía y sin importancia...
...Esta vez s
ólo quiero agradecer a las personas que han estado conmigo, y aunque a veces mi ceguez no me haya dejado verlos, se los agradezco de corazón... Siempre a tu lado hay personas que no crees que se dan cuenta de tu dolor, pero hay personas que sí lo notan, y te das cuenta de que la vida no es tan solitaria como la has sentido siempre...
... Le agradezco a Dios por cuidarme siempre, a mi familia, amigos (en especial a un grupo de amigas que se preocuparon y me preguntaban siempre qué me pasaba, muchas gracias de verdad, por ustedes me di cuenta de que tenia que cambiar eso que me hacia sentir muy mal : nata, vivi, nicole, gaby, muchas gracias)...
Hay algo mejor para mi?, ¿hay algo mejor para ti?, aquí en la tierra están todas las respuestas, escapar no es solución a nada, pero que ganas de escapar, saber qué hay más allá del horizonte, atrás de los cerros, mucho mas allá de las carreteras...
... tengo miedo de vivir una vida normal, con sueños normales, y seguridades normales, hacer eso me convertiría en uno mas de los millones de seres que fingen ser felices pero que no lo son, felicidad, no hay nada mas complicado, ¿existe?, yo creo que si...
... No te vayas, no se vayan, estas ganas de sufrir a veces aumentan, necesito de ti, de ustedes, aunque muchas veces no lo diga, aunque muchas veces lo niegue... Tal vez no sea un
a buena persona, ni un buen hijo, ni un buen amigo... Pero cuando a veces me derroto a mi mismo, necesito de su silenciosa compañía, amigos... Tú, que eres la persona que más fácil influye en mí, sólo con una palabra, una mirada, tienes todo de mí, esta vez no me dejes caer, esta vez no me dejes fingir que todo esta bien... Hazme sentir la verdadera alegría, hazme sonreir de verdad, así podré quererte incluso más que a mi mismo...

... Creo en ti alma mía, el otro que soy no debe humillarse ante ti, ni tú debes ser humillada ante el otro.
Respira conmigo sobre la tierra, quita el freno de tu garganta, esta vez no quiero palabras, ni música, ni rimas, no quiero costumbres ni discursos, ni aún los mejores.
Respira conmigo sobre la tierra, quita el freno de tu garganta, esta vez no quiero palabras, ni música, ni rimas, no quiero costumbres ni discursos, ni aún los mejores.
Sólo quiero la calma, y el arrullo de tu velada voz...