Me detengo un momento, frente a mi el mundo, el viento, la noche. No se explicar como me siento ahora, pareciera que he caminado por el camino incorrecto mucho tiempo, no sé volver, no se avanzar, pongo las manos sobre mis ojos, oigo mis pensamientos mas ocultos, que ellos me guíen donde dar el primer paso. Todo gira, pensamientos revueltos, tu voz, la mía, la de aquellos, basta por ahora, que el silencio gane esta vez.
Momentos felices rondan mis recuerdos, ese abrazo cálido, esa caricia tuya, el olor a tierra mojada, mi origen, mi destino, todo concluye en un punto que yo no sé mirar. Tal vez lo haga algún día, tal vez ni siquiera lo intente.
He pasado mucho tiempo queriendo algo, sin saber exactamente que es, escapo constantemente, caigo otras tantas, busco sin encontrar nada, gritos en mi mente, palabras tuyas, de la gente cercana, palabras mías que dicen que he hecho todo mal, basta por un momento, que gane el silencio esta vez.
Y sin acordes sostenidos camino lejos de lo que soy, perdido exactamente en un lugar conocido, respiro, y vuelvo a avanzar, todo carece de importancia, soy parte de todo, pero nada es parte de mi. Te alejo con querer y luego suplico tu regreso, será siempre así, no intentes repararme, he perdido las piezas finales, he torcido el juego que yo mismo comencé y ahora es tu turno de jugar.
Cerrando vacíos en mis venas, pensamientos vagos, sonidos fugaces, calles oscuras, ¿sabrás encontrarme? no lo hagas, mi boca no dice nada, mientras mi mente le grita al cielo. Por fuera todo parece silencio.
Buscare la manera mas elocuente, buscare las palabras precisas, las repetiré muchas veces en mi cabeza, pero después no diré nada, y en tu boca, habrá silencio, no es necesario que gane esta vez.
Y bajo mi disfraz sabrás ver mi verdadero rostro, mirame fijamente, reconoce sin decirlo todo lo que soy, he dejado de pensar un instante, no digas nada, que esta vez, gane el silencio...
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